25 de noviembre de 2013

¿Una fotografía bella es la foto de algo bello?

SandraAl leer el título la mayoría de vosotros habréis respondido rápidamente ¡no! pero cuando salimos a hacer fotos no nos planteamos ir a cualquier parte, si no allí donde haya cosas «que fotografiar», es decir, cosas bellas.

Dice Sunsan Sontag en «Sobre la fotografía»: Nadie jamás descubrió la fealdad por medio de las fotografías; pero muchos, por medio de las fotografías, han descubierto la belleza. Salvo en aquellas situaciones en las cuales la cámara se utiliza para documentar, o para señalar ritos sociales, lo que mueve a la gente a hacer fotografías es el hallazgo de algo bello. (El nombre con que Fox T albot patentó la fotografía en 1841 fue calotipo: de ka/os, bello.) Nadie exclama: «¡Qué feo es eso! Tengo que fotografiarlo». Aun si alguien en efecto lo dijera, todo su sentido sería: «Esa cosa fea me parece... bella».


A todos nos gustan las fotos de cosas bellas, y casi sin mirar más allá las juzgamos como fotos bellas. No nos importa demasiado si está bien o mal compuesta, iluminada, enfocada, etc. Son pecadillos que perdonamos. Fotografiar la belleza es un instinto casi primario, y vamos por ahí con la cámara en ristre buscando esas cosas bellas que muy pocos han visto.

Otra opción es fotografiar lo feo, la decadencia, pero para embellecerlo, para descubrir esa belleza que tiene lo feo. En estas fotografía de lo feo todo lo que aparece es feo, la fealdad se sublima y descubrimos su belleza por saturación. Aquí nos tenemos que emplear más a fondo con la composición, la luz y los recursos técnicos para que lo feo no termine siendo una foto fea. Es la fotografía, la visión fotográfica, lo que embellece la fealdad.

Menos habitual, pero se ve en ocasiones, es la belleza en un entorno feo, la rosa en la basura. Aquí es la belleza lo que vuelve a salvar la foto. Expresamos el contraste entre lo delicado de la belleza y la agresión de lo feo. La belleza salva a la fealdad, y el motivo de nuestras fotos vuelve a ser la belleza.

Lo más extraño de todo es lo feo en un entorno bello. En la mayoría de los casos tiramos esas fotos. No toleramos la puesta de sol en la que aparece un contenedor de basura, un coche, y muchas veces ni siquiera gente, a no ser que estén a contraluz. Lo feo, aquí, es una agresión. No importa que esté bien compuesta, solo si tiene un mensaje de denuncia la salvaremos.

Así que, ¿una fotografía bella es la foto de algo bello?

cc-by-sa

1 comentario:

  1. A mí me gusta hacer fotos a cosas feas. Por eso hago tanto autorretrato. ;o)

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